La CEOE pone a los funcionarios en su punto de mira


La CEOE empieza a tocarme las narices.A priori se me ocurre que los empresarios de este país podrían hacer muchas cosas interesantes para mejorarnos la calidad de vida y, desde su sabiduría, aportar inteligentes soluciones a la crisis o a nuestros problemas cotidianos. Sin embargo una rápida visión a la prensa económica de las últimas semanas nos demostrará que tras la caída (eso sí más lenta de lo deseable) del gran Gerardo Díaz Ferrán los candidatos al sillón de tan ilustre puesto tienen una tirria manifesta hacia los empleados públicos. Es más, en sus intervenciones parece que todos se han ido de fiesta y tras un colocón del quince han decidido que su mejor apuesta para salvar al país sin que el gobierno le toque sus empresas, ni un céntimo de sus ganancias, pasa por cepillarse a miles o millones de funcionarios.
Hoy mismo entro en Expansión-Función Pública y de once titulares en su portada hay dos dedicados a los candidatos a presidir la CEOE y a cada cual más elocuente: "Banegas propone prohibir los nombramientos a dedo de funcionarios" y "Rosell: Hay más de 150.000 funcionarios del Estado que no tienen nada que hacer".  Sobre el primer asunto, el de los funcionarios a dedo poco voy a decir, máxime cuando el Tribunal Supremo le ha dicho a nuestro presidente del gobierno que quite  a seis altos cargos y hasta el momento se lo ha pasado por el forro. Personalmente y conociendo el patio en Andalucía me preocupan aún más la administración paralela que los órganos políticos del PSOE han montado gracias a su eterna hegemonía.
Por su parte Rosell, que hace gala de su catalinidad y el tópico la pela es la pela, llega a proponer un ERE en su gobierno autonómico. Tampoco quiero dedicarle mucho espacio a la criatura y prefiero hacer referencia al gran blog Administraciones en Red, donde en su última entrada aporta cifras interesantes sobre los funcionarios en la Unión Europea:
"En España trabajan para el sector público el 9% de las personas adultas, mientras que en la UE-15 este porcentaje es del 16%. Y en los países más desarrollados del norte de Europa esta cifra escala por encima del 20%"
En fin, son temas recurrentes y a veces me recuerda al eterno debate del huevo y la gallina. Pero quiero llamar la atención sobre ese personaje que muy pronto representará a los empresarios de nuestro país y que visto los titulares será un auténtico xenófobo antifuncionarial. Y yo, iluso, llegué a pensar que Gerardo Díaz Ferrán, que representó durante meses a los empresarios haciendo quebrar a sus empresas y dejando en el paro a miles de personas era difícil de superar.

Funcionarios sin cobrar y ayuntamientos al borde del colapso: todos pendientes del salvavidas del vecino

La situación de algunos ayuntamientos es crítica. La segunda consecuencia es el impago de las nóminas de los funcionarios,  una situación que provoca la sonrisita pícara y maliciosa de quienes nos consideran sanguijuelas o de aquellos que no han tenido el empeño suficiente de sacarse unas oposiciones. Para llegar a esta segunda situación antes hay que fastidiar y arruinar a miles de proveedores, con sus correspondientes empleos directos e indirectos. No seré el primero en analizar este turbio e inquietante panorama, Antonio Arias lo hizo a la perfección en  su blog con interesantes recortes de prensa y una contundente fotografía: una vez más los españoles preferimos alegrarnos la vida con la victoria de la selección antes que ponernos a pensar un poquito en la que se nos avecina.
Tengo muy presente, porque conozco bien el caso, al ayuntamiento de Jerez de la Frontera (PSOE), con su deuda de 700 millones de euros y el impago regular de la nómina de sus funcionarios. Relativamente cerca está el de la Línea de la Concepción y podríamos disertar sobre las razones que han llevado a la ruina a los entes locales. Sería como debatir sobre el huevo o la gallina  y terminaríamos entrando en política y terrenos pantanosos. Personalmente y tras conocer a un buen número de alcaldes y políticos dudo mucho que la función primordial de un ayuntamiento sea la de ganar diero y tener superávit. La administración local no es un banco. Aún así en mi entorno tengo ayuntamientos que guardan en depósitos bancarios decenas de millones de euros de beneficios que lejos de invertirlos en infraestructuras o servicios prefieren guardarlos recogiendo por adelantado (como hace La Caixa) sus intereses anuales.
Uno de los recursos fáciles a la hora de argumentar la ruina de algunos ayuntamientos pasa por criticar sin corte alguno la gestión del político de turno. Un político no es un experto en finanzas ni un mago de la ingeniería financiera. También hay quienes aventuran que una panda de inútiles nos gobiernan y que en la empresa privada nada de esto sucedería. Y sin embargo todos conocemos el caso del simpático presidente y representante de los empresarios españoles (CEOE), Gerardo Díaz Ferrán (que en unos días se paseará con Zapatero en Shangai), cuya gestión de Viajes Marsans debería haberlo puesto fuera de juego de cualquier iniciativa empresarial y sin embargo sigue tan ricamente dando lecciones al mundo sobre economía y reforma laboral.
Mientras muchos ayuntamientos están al borde del abismo centenares de alcaldes observan con atención e interés las maniobras del gobierno. En el fondo todos desean que en un desliz de un presidiente que nos tiene acostumbrados a la improvisación saque un conejo de una chistera y condone la deuda de algún consistorio emblemático... y acto seguido miles de alcaldes levantarán la mano: unos pedirán el mismo trato de favor y otros denunciarán el trato de favor. Y la polémica volverá a estar servida.
Por ahora, en los mentideros el rumor con más peso es el del posible anuncio del gobierno para que los ayuntamientos abonen todas sus deudas (fiscalizadas antes del mes de abril de 2010) de un plumazo mediante un préstamo del ICO a devolver en veinte o treinta años. Una bendición divina para las miles de empresas asfixiadas por los ayuntamientos...y también para sus funcionarios.

Funcionarios...¿el peor enemigo de los funcionarios?

Reconozco que la polémica decisión del gobierno de reducir nuestras nóminas entre un 5 y un 15% no me quita el sueño. Tampoco me indigna demasiado, es decir seré un 5% más pobre pero no un 5% menos feliz. Creo que no merece la pena traumatizarse pensando mucho al respecto. ¿Podrían haber tomado otras medidas mejor? ¿puedo aportar soluciones a la crisis? No, y aunque tuviese respuestas mágicas y magistrales tengo la certeza de que ningún responsable político de este país las tendría en cuenta. Esto es como el fútbol, no dejo de escuchar comentarios a la hora del café sobre fichajes, estrategias, ascensos, jugadas...y pocos son los que aciertan la quiniela. Los toros, desde la barrera, se ven con otro color y otra tranquilidad.  
A priori estoy convencido de que las ideas que parten del amigo Sevach son mucho más sensatas y razonables que las de nuestros gobernantes. Miles de "iluminados" aportan su granito de arena en blogs y otros medios de comunicación, pero lo cierto es que en un sistema democrático como el nuestro en su momento nos llegará el turno de decidir si el capitán de nuestro barco debe seguir o no al frente del país. Como he comentado en otras tantas ocasiones al final tenemos lo que nos merecemos. Soy un poco aséptico y escéptico en todo esto, pero no puedo dejar de cabrearme al considerar que en muchas ocasiones nuestros peores enemigos somos nosotros mismos. Os lo muestro...
A los pocos minutos de saltar la noticia el pasado miércoles sobre las decisión de rebajar nuestros sueldos los foros, blogs y redacciones digitales del país se colapsaban por comentaristas funcionarios. En mi propio ayuntamiento la noticia se expandió a la velocidad de la luz. Ejemplos de lo que os quiero trasladar los hay en muchos rinconcitos pero el más expresivo quizá sea el de El Mundo, donde apenas una hora después se colgaba una información que hasta ayer fue (lamentablemente) una de las más consultadas: "Si el gobierno me baja el sueldo, yo me lo cobraré en tiempo". Idea que he podido leer en decenas de páginas diferentes, desde profesores de instituto a secretarios judiciales.
No estoy conforme con la medida del gobierno. No me gusta y no me parece justa,  pero me parece una tomadura de pelo y una falta de respeto que algunos funcionarios (demonizados en muchos casos por esta sociedad) pierdan el norte y nos dejen con el culo al aire y a la altura de una babucha al resto. En esta noticia en concreto el funcionario en cuestión, que va cada treinta minutos a fumarse un cigarrito ahora piensa hacerlo cada diez...ea, sin complejos. Hasta las putadas deberíamos tomarlas con más dignidad y temple. Seamos más inteligentes y estemos a la altura de la circunstancias pero, en la medida de nuestras posibilidades, intentemos que nuestra profesión y nuestra imagen no se hunda aún más por los suelos. No le demos más motivos a quienes nos consideran sanguijuelas sociales ni a quienes nos utilizan para que lo parezcamos.
Y el que decida rascarse los huevos un 5% más...que por favor no lo cuente en voz alta.

Solidarios de pacotilla, hipócritas de postín

En los algo más de trece años que llevo en la administración he asistido perplejo a un buen número de ejemplos sobre personas que cumplen escrupulosamente con el título de esta entrada. Si permanecemos atentos a nuestro alrededor sabremos reconocerlos con cierta sutileza. Y desde la atalaya, en parte privilegiada, que es estar junto a un alcalde los ejemplos de mezquindad son más acentuados.
Me refiero a esas personas que en el día a día se dan golpecitos en el pecho ante grandes crisis humanitarias, que se las dan de solidarias, progesistas y con un talante superior incluso al del presidente del gobierno pero que a la hora de la verdad sufren una transformación peor que la de Kafka.
Ejemplos. Esos padres que deciden montar en cólera (primero ante el ayuntamiento y luego ante la delegación de Educación del gobierno regional) porque no quieren que sus hijos estén en el mismo aula que una pequeña cuyos padres padecen el SIDA. Mi colega el comunista de nobles sentimientos, enemigo de Obama y amoroso con Fidel, que tiene el morro de interrogarme durante horas "porque me he enterado que a dos manzanas de mi casa van unas viviendas sociales y quiero saber si debo irme a otro pueblo...el alcalde debería tener cuidado con estas cosas y cuidar a sus vecinos". Sí señor un tio de izquierdas de los buenos.
La gotita que colma el vaso se ha producido esta semana, cuando he tenido que atender a un colectivo vecinal indignado, envenenado, mentirosos y molestos que reclaman una reunión in extremis con el alcalde. El motivo no es otro que la instalación de un comedor social en uno de los locales colindantes a su edificio. Lo curioso de esta historia es que hasta hace unos meses en este mismo lugar había un gran restaurante que destacaba por sus ruidos y sus emisiones de humos por los hornos, las parrillas y alguna que otra denuncia vecinal. La cosa es que cuando estos vecinos de gran corazón me tocan las narices y les pregunto si¿prefieren que en vez de un comedor social el ayuntamiento apruebe la licencia de apertura para otro restaurante como el de antes, sin pestañear respondan "por supuesto".
Este tipo de personas y exigencias tocapelotas son los que me sacan de mis casillas. Me entran ganas de atenderles como el de la foto, hacerles un gran corte de mangas y decirles que el alcalde los recibirá cuando las ranas canten flamenco.

La jubilación de los funcionarios y el mundo mágico de Harry Potter

Entiendo que el título puede llevar a confusión. También asumo que si en vez de citar al mago de Hogwarts coloco: "La jubilación de los funcionarios y las tetas de Pamela Anderson" -incluyendo una foto de la brillante actriz- las visitas se multiplicarían por cien pero entonces limitaría su recomendación en Expansión...así que he decidido ser bueno e introducir cierta sensatez.
Ahora dejad de pensar en Pamela y fijaros en la foto. Se llama Fumanchú, tiene 81 años y trabaja en los servicios operativos de un pueblo chino, donde gracias a un fondo estatal han decidido colocar adoquines en una autopista de doce carriles. La cosa es que me veo como mi primo el chino persiguiendo con el tacataca a las compis de la asesoría jurídica.
Algo está pasando; la crisis parece que multiplica exponencialmente las teorías (leáse como "tonterías") del mercado laboral y el futuro se me antoja amenazador. Comenzaré por una realidad que está afectando con cuentagotas a muchos funcionarios y terminaré con el mundo de Potter. Y es que a día de hoy, como piedrecitas pequeñas que van cayendo en una gran tinaja, muchos funcionarios están pendientes del desarrollo del Estatuto Básico del Empleado Público -EBEP- en el apartado que posibilita su jubilación parcial, una situación que paradojicamente está permitida para el personal laboral. Para quienes no conozcan este beneplácito es algo así como trabajar menos de un mes al año y cobrar todos los meses como si estuvieses trabajando los once meses restantes. Pero aunque el EBEP contemple esta posibilidad sin dudas ni ambigüedades la realidad es muy diferente y los juzgados acumulan denuncias de funcionarios que están en torno a los sesenta años, que señalan al Estatuto y que sus administraciones miran hacia la luna dejándolo en manos de los tribunales. Lo normal es que mientras llega la sentencia el funcionario en cuestión se encuentre ya con sus 65 años o en una caja de madera a dos metros bajo tierra.
Así pues, mientras unos están pendientes de los juzgados (y de la página de Sevach, que recoge de vez en cuando este mismo asunto), otros se fijan en el municipio vecino, donde están al borde de la quiebra y el alcalde ha decidido pedir permiso a su administración autonómica para ir largando a los funcionarios más "ancianos". Aunque por ahora ninguna administración se ha pronunciado porque sería como abrir una caja de pandora...un gran colador por donde saldrían muchísimos compañeros deseosos de abandonarse a la vida contemplativa.
En el mundo mágico de Harry me encuentro con noticias que podrían darle coba al guión de la octava o novena secuela, cuando el mago sea un funcionario en toda regla y esté dando clases en la universidad de Hogwarts mientras aplica el Plan Bolonia. No puedo enteder de otra forma que quieran hacernos trabajar 65 horas a la semana, que los expertos propongan cambiarnos la hora o que, a pesar de todo, diversos informes internacionales demuestren que los españoles trabajamos más que el resto de los europeos.
No entiendo nada...me voy a buscar a Pamela en Google y que le den a Harry Potter.

Yo también quiero ser como José Ramón. Crónica de una censura absurda a un inteligente funcionario

Hace algo más de un año y medio conocimos que el Ministerio de Defensa restringió de un plumazo el acceso de los militares a determinadas páginas web: no podían leer ni el Marca, ni Interviú, ni acceder a blogs o foros sociales. Esto me produjo una gran sonrisa. Imaginé a nuestros marines custodiando la Isla de Perejil mientras los marroquíes conquistaban el peñasco y secuestraban a la única cabra residente (y empadronada en España, según el INE). Luego la violaban, descuartizaban y asaban a la barbacoa. Pero nuestros soldados dejaban desamparada a la cabra porque en ese momento estaban leyendo el Marca o chateando por el messenger. De todos modos daba igual si se daban cuenta porque a la hora de transmitir la información al cuartel del Estado Mayor para la Defensa el sargento de guardia tenía su mirada en la última portada de Interviú...y en cualquier caso en la cabeza de la escala de mando la propia ministra Chacón tampoco tendría noticias de la tragedia porque estaría tonteando con la blackberry mientras tomaba el sol en una playa de Lanzarote. Un verdadero desastre nacional.
Por aquel entonces la medida del gobierno ocultaba soterradamente un maquiavélico plan para que los militares no terminasen leyendo las noticias incomodas en contra de la ministra.
Ahora asisto atónito a una medida similar. Según publican medios de comunicación asturianos mi admirado José Ramón Chaves, juez de lo Contencioso Administrativo y artífice de la web http://www.contencioso.es/ está siendo objeto de censura por parte del propio gobierno autonómico, que ha decido prohibir el acceso a su página desde los ordenadores de la propia administración. Cuando lo he sabido he vuelto a sonreir.  Inmediatamente José Ramón ha pasado a estar dentro de la selecta lista de personajes influyentes e importantes, renegados, sumisos y potencialmente peligrosos. Da gusto tener amigos tan perseguidos y quizá algún día el FBI decida coger su foto para hacer el retrato robot de Bin Laden. Un paseo por la red nos aporta violaciones de los Derechos Humanos y de la Libertad de Expresión en China, Cuba, Irán, Corea del Norte...y ahora en Asturias.
No voy a entrar en consideraciones prácticas sobre optimización de recursos por parte de los funcionarios (con sus distracciones en páginas web) ni en la gravedad ética de la medida pero el lumbreras que tuvo la brillante idea de prohibir el acceso a la web de José Ramón tiene menos cerebro que una ameba. Que lo hagan en China puede tener su cosilla porque no hay narices de acceder a páginas restringidas desde ningún lugar pero en Asturias para leer los geniales análisis de http://www.contencioso.es/ se puede hacer desde cualquier ordenador que esté fuera de la administración pública. También hay que ser torpe, muy torpe, al justificar que las limitaciones afectan sólo a blogs y foros cuando la tribuna del juez y funcionario Chaves es una página web en toda regla. Por si esto no fuese suficiente al listo estratega político  se le escapó pensar en que esta medida propiciaría todo lo contrario y que, además de una proyección mediática francamente pésima del gobierno asturiano, las visitas a la web proscrita seguramente habrán aumentado considerablemente. Ahora me estoy imaginando que los artículos de José Ramón pasarán por las dependencias de la administración como fardos de fotocopias de contrabando entre distintos departamentos...y joder, la envídia me corroe porque esto da un caché blogero que muy pocos internautas españoles conocen. Ya me gustaría presumir ante mis amigos diciéndoles que tengo un blog censurado...incluso con un poco de suerte podría llegar a impresionar a la secretaria maciza de la quinta planta.
Además de mi apoyo incondicional a José Ramón, cuyos textos me han ofrecido una infinidad de puntos de vista sublimes, desde aqui le ofrezco esta humilde tribuna para replicar su web y burlar de esta forma a la censura administrativa...o, con un poco de suerte, convertirme con deseo en otra proscrita web para los inteligentes responsables políticos asturianos.
Salmorejo, pescaito frito, potaje de berzas y que no falte el  vino de la Serranía de Ronda...a la salud de José Ramón.

El Gobierno de Canarias prefiere inculcarnos buenos deseos que mostrarnos su oferta turística

Las Islas Canarias son diferentes...y son diferentes cada uno de los siete cachitos de tierra volcánica diseminadas en algún lugar del océano Atlántico. Mientras la península amanece un día más con frío, viento y lluvia os amargo un poco la existencia y os digo que acabo de regresar de una playita situada en Arinaga  refugiada del viento, con un agua cristalina y un sol de justicia que nos ha dado esta mañana 27 grados.
La gente de aqui es única, llevan un reloj interno más pausado, son más latinos y en los últimos días he descubierto que hasta las campañas publicitarias del Gobierno de Canarias no siguen la misma línea que el resto del mundo. Mientras otras comunidades autónomas destinan sus campañas publicitarias a promocionar sus excelencias turísticas los canarios me han dejado perplejo con el video que os muestro...toda una declaración de intenciones y buenos propósitos sobre el 2010.
Que cunda el ejemplo...yo me voy de nuevo a la playa.